Dos casos de éxito de Extremadura, refererentes de la implantación de energías renovables en el sector primario

El encuentro, que contó con 40 participantes entre los que se encontraban autoridades de ámbito regional y nacional, estuvo organizado por el Regional Council of North Karelia. Así, el público asistente estuvo conformado por representantes de ayuntamientos, agencias de energía, empresas e instituciones de educación superior de España, Polonia, Reino Unido, Finlandia, Rumanía, Italia e Irlanda.

El evento se centró en la presentación de buenas prácticas de las distintas regiones participantes para aprender de los casos de éxitos de las regiones participantes y aplicar soluciones similares en Extremadura.

AGENEX presentó dos buenas prácticas de la región: una centrada en la producción de energía elétrica gracias a la generación de una planta fotovoltaica flotante que ha instalado la Comunidad de Regantes de Mérida. La segunda, refrente a la producción de electricidad y abastecimiento de sistemas de frío-calor gracias al uso de restos agrícolas y forestales.

Planta fotovoltaica flotante

Como consecuencia de la falta de terreno necesario para su instalación, la Comunidad de Regantes de Mérida ha impulsado una de las mayores plantas fotovoltaicas flotantes del mundo. Uno de los principales costes de producción del sector agrícola es el energético, ya que la factura de la luz aumenta durante los meses de la campaña, llegando hasta los 200.000 €. Con el fin de minimizar estos costes, se planteó la posibilidad de instalar una planta fotovoltaica convencional, pero, debido a la falta de espacio, se concluyó que el único lugar para hacer posible la instalación sería en la balsa de agua para riego.

La planta solar está compuesta por 1600 paneles fotovoltaicos sobre el agua, con una extensión de 4 ha. El proyecto está proyectado en 4 partes, y de momento solo se ha realizado la primera etapa con un coste de inversión de 744.695,23 € y con la cofinanciación del 75% de fondos FEADER.

Actualmente, la potencia de esta planta de riego es de 500kW. Sin embargo, en el futuro, con las otras 4 etapas creadas, podría llegar a 2,5MW.

Este proyecto nació al amparo de una iniciativa del gobierno regional. El objetivo de la planta de riego es minimizar los costes de las explotaciones agrícolas y reducir las emisiones de carbono.

Este es un buen ejemplo de optimización del uso de la tierra mediante el uso de tecnologías de producción de energías renovables. La principal ventaja para la Comunidad de Regantes es reducir la factura del suministro de energía eléctrica para riego presurizado. Al colocar los paneles fotovoltaicos sobre el agua, se produce un enfriamiento que aumenta la eficiencia energética en aproximadamente un 10%.

Además, al cubrir parte de la superficie, se reduce la evaporación del agua en un 80% y se previene la proliferación de ciertos tipos de algas y microorganismos, lo que aumenta la calidad del agua y reduce los costes de mantenimiento hidráulico.

Producción de energía eléctrica, frío y calor mediante el aprovechamiento de residuos forestales y agrícolas

Un consorcio de empresas y la Universidad de Extremadura desarrollan un prototipo que utiliza biomasa de poda y residuos agroindustriales como principal combustible.

El principal objetivo del Proyecto TRIBAR “Microgenerador de biomasa-solar de uso residual” es obtener electricidad, frío y calor industrial a través de un sistema compacto, modular, escalable y portátil que hibrida la energía solar y aprovecha los residuos agrícolas o forestales y así permite reducir la energía eléctrica contratada por los agricultores.

El calor proporcionado por este prototipo puede ser la única fuente de energía del sistema o combinarse con el generado por una caldera de biomasa, que a su vez también puede ser la única fuente de energía de la planta. Parte de este calor se puede utilizar para generar electricidad. Otra parte se puede dedicar a la generación de frío industrial, a través de una máquina de absorción y el resto del calor se puede utilizar para calefacción o procesos industriales.

Este prototipo está ubicado en las instalaciones de la fábrica de biocombustibles sólidos a partir de residuos forestales y agrícolas. Esta planta está diseñada para satisfacer las necesidades específicas de la empresa y está compuesta por caldera, campo solar Fresnel, turbina, enfriador de absorción, sistema de disipación de calor y un sistema de control.

Los principales consumidores de este sistema serán las industrias agroalimentarias ubicadas en lugares remotos con difícil acceso a la electricidad (lo que encarece sus productos). Los residuos de estas industrias serán las materias primas que se utilizarán para la generación de energía.

TRIBAR es un proyecto financiado por el Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial, cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y apoyado por el Ministerio de Economía y Competitividad.

En esta planta, el proceso de micro-trigeneración produce alrededor de 400 kW de energía térmica, 50 kW de electricidad y 35 kW de frío gracias a un proceso de hibridación entre biomasa y energía solar.

En la actividad agroalimentaria, la cosecha es estacional y por ello también el consumo energético. Esto obliga a las empresas a contratar una potencia muy elevada, innecesaria durante el resto del año, con el consiguiente gasto económico.

Este proyecto se puede implementar en cualquier parte del mundo con acceso a residuos agrícolas de biomasa, siendo especialmente interesante en situaciones de demanda energética estacional intensiva y en lugares aislados donde las redes de transporte son deficientes y el transporte de combustibles como gas o diesel es un gran problema logístico.

Al final del webinar, los participantes evaluaron las distintas prácticas compartidas en el mismo para determinar el potencial de replicabilidad de cada una de ellas en otros territorios. Puedes encontrar más información sobre ellas en la web de AgroRES: www.interregeurope.eu/agrores/library/

El proyecto AgroRES está financiado por el programa INTERREG EUROPE, dedicado al desarrollo de medidas que impulsen la producción y uso de energías renovables en el sector agrícola y en el ámbito rural.