El conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent ha destacado que el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace), dependiente de la conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo prevé destinar en 2023 un total de 5 millones de euros para respaldar proyectos de energías renovables que sean desarrollados por comunidades de energía,
El conseller de Economía Sostenible, junto a la directora del Ivace, han visitado el polígono Fuente del Jarro para conocer de primera mano el proyecto de autoconsumo compartido desarrollado por la comunidad de propietarios del Polígono Industrial Fuente del Jarro (Asivalco), que ha contado con la ayuda económica del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace).
Se trata de una instalación fotovoltaica de 33 Kw, que abastece a 6 naves pertenecientes a 4 empresas distintas, que entró en funcionamiento el pasado 1 de julio de 2022. El proyecto ha contado con el respaldo económico del Ivace, que ha aportado 14.000 euros y tal y como ha explicado Climent es un “inicio prometedor que estoy seguro será exitoso e irá progresivamente creciendo e incorporando a muchas más empresas de Fuente del Jarro”
De hecho, Asivalco ya puso en marcha una instalación fotovoltaica de 10 kW en su sede en 2019 y está promoviendo otros proyectos para las empresas del área de servicios de Fuente del jarro y alrededores y también prevé, en colaboración con el Ayuntamiento de Paterna, la instalación de marquesinas en plaza de parking con placas fotovoltaicas en la cubierta.
En su intervención Climent se ha referido a las comunidades de energía como elemento clave en la transición energética, ya que “persiguen fines no sólo económicos, sino también fomentar la participación ciudadana, la utilización de las cadenas de suministro locales y brindar oportunidades de empleo, manteniendo el valor de la generación de la energía dentro de la población local”.
Para el titular de Economía Sostenible, “la producción de energía a nivel local es indispensable para fomentar la producción de energía renovable, difundir la democracia energética y reducir las tasas de pobreza energética y las comunidades locales de energía constituyen una pieza esencial para lograr la descentralización y democratización de los sistemas energéticos y fomentar un desarrollo económico y social sostenible a nivel local”.
Así pues, el conseller ha explicado que con la de este año, son ya tres ediciones de la línea de ayudas del Ivace para impulsar las instalaciones de autoconsumo de energía eléctrica en comunidades de energías renovables y “el número de proyectos respaldados ha ido aumentando muy significativamente al pasar de 7 proyectos el primer año, a 48 en 2021 y 70 iniciativas en 2022”.
Climent ha abogado por una “auténtica transformación del sistema energético que nos lleve no sólo a un modelo sostenible sino también a “un nuevo modelo más justo, inclusivo y participativo” en el que la producción de energía está en manos de la ciudadanía, como parte activa que participa y se beneficia, a través de las comunidades energéticas, de la generación, la distribución, la gestión y el consumo de energía a nivel local.
Ayudas del Ivace a las Comunidades de Energía
La línea de ayudas del Ivace está dirigida a cualquier comunidad de energías renovables o comunidad energética, ayuntamientos, así como las comunidades de propietarios, a través de la cual se subvenciona hasta en un 45% el coste de los proyectos de las instalaciones de autoconsumo de energía eléctrica a partir de energías renovables o energías residuales, en régimen de comunidades de energías renovables.
Ivace Energía subvenciona hasta un 45% del coste de las instalaciones de energía solar fotovoltaica, para la generación y autoconsumo colectivo y la cuantía máxima subvencionable por proyecto es de 200.000 euros. No obstante, la intensidad de la ayuda podrá incrementarse en hasta 10 puntos porcentuales para medianas empresas, y en hasta 20 puntos porcentuales para las pequeñas empresas, ayuntamientos, entidades públicas e instituciones sin ánimo de lucro.
Se considera comunidad energética renovable, la entidad jurídica que se base en una participación abierta y voluntaria, autónoma y efectivamente controlada por sus miembros, situados en las proximidades de los proyectos propiedad de la agrupación, que sean personas físicas, pymes o autoridades locales, incluidos los municipios, y que desarrolle proyectos de energías renovables, eficiencia energética y/o movilidad sostenible.
La finalidad de la actividad de la agrupación ha de ser proporcionar beneficios medioambientales, económicos o sociales a sus miembros o a las zonas locales donde opera, en lugar de ganancias financieras.